martes, 9 de junio de 2015

1

Y la cama vuelve a ser grande.

Hola amigos, estoy vivo y bien, y como ni Sancho ni Okapi se deciden a escribir nada sobre "la boda" voy a plasmar mis sensaciones de mi segunda huida de casa y tercera huida del país. Para los que no lo sabéis he salido, a Burdeos esta vez, en Francia, soy un poco redundante lo sé.

En fin, día del vuelo, resaca de la boda, llego al aeropuerto y todo bien hasta que de repente, por razones que aun no conozco el vuelo se retrasa 3 horas, y mi amigo el contacto de aquí no daba señales de vida, tuve que apañármelas mordiéndome las uñas de los pies de nervios. Eso si, Burdeos, al atardecer, desde el avión es impagable, el Garona es un río enorme y muy bonito. Llego al aeropuerto, y sin problemas me encamino a casa de mi amigo Koke que tenía que estar esperándome en el tranvía pero no "escuchó" el móvil. Primer día bastante bien, reencuentros pero dormí mal y al día siguiente al trabajo a las 9. Me puse malo, aquí hace un calor flipante, hasta hoy no hemos bajado de 30 grados durante el día, inhumano. Y así van pasando los días.

He de decir que ya tengo casa, con un sofá cama por el momento y va a venir otro así que sitio hay hasta para cuatro personas, u 8 apretaditas jejej aquí os espero. Lo mejor del piso, que mi cama es grande, muy grande,.... lo peor, ya lo veréis.

Un abrazo para todos y espero más entradas por aquí.


1 comentario:

  1. Mon ami, pues que el piso sea bueno y la compañía también.
    Disfruta allí

    ResponderEliminar