¡Ahi va, la hostia!

Tarde tranquila de compras por Alcalá...Tardamos en salir de mi casa porque Okapi se entretuvo hablando con mi padre bastante ratico... y cuando le convencimos no quería. Fuimos a tomarnos unas tortitas y llegamos a una conclusión, los jóvenes se sientan en las mesas (o sea nosotros) y lo pederastas se sientan en la barra.
Okapi se estuvo paseando por ahí con una bolsa vacía como si llevase algo importante (llevaba una hoja de acetato pero no se veía así que era como si fuese vacía). Después fuimos a comprar unas pizzas al carrefur y tuvo que dejar la bolsa en la taquilla, pero bueno, como no tenía hambre se puso a seguir a una rubia por todos los pasillos mientras Sancho y yo comprábamos algo de jalar.
Volvimos al coche para ir ya a casa y Sancho cogió la bufanda de Okapi para calentarse las orejas:
Okapi- "¡Tuuu!"
Sancho- "¡ No, Tuuu no, Yoooo!"
Algo que esta gente no entiende son los escalofríos , a mi me dio uno mientras veíamos la película (Supermaderos) y se pensaron que era un calambrazo o algo: Sancho se quedó gritando 5 minutos...
Y después quiso chocar la mano y nadie se la chocó, con lo que estuvo un rato largo con la mano arriba hasta que se le empezó a quedar congelada y muy fría; el final es predecible, se la tuvieron que amputar.

Para terminar, el golpe más absurdo del mundo, pero no por ello menos gracioso: